¿Qué es Grindr?
El siglo XXI ha llegado a las interacciones sociales y derivado de ello y quizás de forma más específica en determinados colectivos, a las relaciones sexuales. Puede que algunos de los lectores de este post no conozcan la aplicación (o similares) o quizás, conociéndola, no hayan tenido un contacto cercano con la misma (ya sea personal o a través de un amigo, compañero laboral, etc.). A riego de parecer simplista, Grindr es una aplicación, utilizada diariamente por entre 4 y 6 millones de usuarios mundialmente, que favorece la comunicación entre dos o más personas con el fin, la mayor de las veces, de mantener un encuentro sexual o cumplir algún tipo de fantasía.
¿Cuál parece ser el problema?
Mucho se ha escrito sobre cómo aplicaciones de este tipo pueden afectar al estado de ánimo, a la estima o valoraciones de uno mismo y a las propias relaciones personales de aquellos que la utilizan. Es muy frecuente encontrar, dentro de sus usuarios, personas que pese a utilizar la aplicación de forma frecuente no disfrutan de su uso. En concreto algunos estudios apuntan que el 77% de usuarios de Grindr se sienten insatisfechos momentos después de utilizar la aplicación (humanetech.com).
Algunos artículos y ensayos disertan sobre la nociva combinación de variables culturales del colectivo LGTBIQ+ con la utilización de aplicaciones que favorezcan las interacciones sexuales. De forma general y simplista, valores incluidos dentro de este grupo cultural como la hipersexualidad, superficialidad, jerarquización, valores sexistas o la facilidad a la exclusión se acrecientan e intensifican dentro de estas aplicaciones. Otras perspectivas relacionadas con estos temas comentan como la utilización de estas aplicaciones modifican y deterioran ciertas pautas y/o comportamientos relativos a lo que se denomina dating culture.
Pero ¿por qué Grindr es tan susceptible de crear ese “enganche”? De forma general gran parte del “enganche” que se puede tener a estas aplicaciones es por su contenido y finalidad, es decir, aquello que se obtiene no es un like o un comentario; es mantener una relación sexual, así como compartir o visualizar contenido de carácter sexual. Por otro lado, pueden darse diferentes procesos en cada persona: habrá personas que pasen mucho tiempo en estas aplicaciones porque es una forma fácil y cómoda de recibir un feedback positivo en cuanto a su físico o apariencia, habrá otros que lo hagan por aburrimiento (es decir que es su contexto no haya otras cosas más apetitivas que compitan con esto), etc. Aún así la mayor parte de las personas le dedican en elevado tiempo de su atención por un proceso denominado refuerzo intermitente. Esto quiere decir que, en algunas ocasiones, la persona acuerda un tipo de relación sexual a los dos mensajes (hablando a 3 personas diferentes) y en otras tras toda una serie de intentos con toda una serie de personas diferentes. Básicamente, si a veces lo consigues con 4 mensajes y en otras con más de 20 llega un momento que la línea media de frecuencia de intento es elevada independientemente del fracaso de la mayor parte de los intentos, básicamente nunca puedes anticipar con certeza cuánto tiempo y cuántos mensajes tendrás que intercambiar para obtener lo que quieres.
¿Estoy haciendo un uso inadecuado?
Un mal uso de la aplicación no se debe al tiempo que le puedas dedicar, se debe a la falta de control. Una cosa está relacionada con la otra, pero el verdadero indicativo de que convendría cambiar tu uso de Grindr es si la aplicación está teniendo demasiada importancia y peso en tu día a día hasta el punto de deteriorar o dificultar otras facetas de tu vida (estudios, trabajos, obligaciones, relaciones personales, etc.)
Comentado esto y a nivel general, ¿quieres saber si estas haciendo un uso inadecuado? Hazte estas preguntas:
- ¿Consume demasiado más tiempo del que te gustaría?
- ¿Has llegado a dejar de lado obligaciones laborales, familiares o personales por su utilización?
- ¿Te afecta de forma desmedida la opinión de la gente que utiliza la aplicación?
- ¿Eres capaz de no contradecir opiniones o deseos de terceros con tal de mantener una relación sexual?
Si la respuesta a las preguntas, la mayor parte de las veces que utilizas la aplicación, es afirmativa, entonces te convendría cambiar la forma en la que la utilizas. Aumentando el nivel de control tanto en el uso de la aplicación como en las ganas o necesidad de mantener una relación sexual podrás disfrutar de esta herramienta sin deteriorar otras facetas de tu vida.
Los problemas de control muchas veces tienden a confundirse con problemas de adicción, el saber popular malinterpreta que una persona de forma continuada realice unos comportamientos (por la intensidad del beneficio que deriva) con no poder dejar de recibir dicho beneficio. Que una persona mantenga tres relaciones o encuentros sexuales en un solo día no es adicción al sexo, puede ser un problema de control de la necesidad de mantener esa relación y de función. Por un lado, la persona puede no tener herramientas para controlar las ganas de acostarse con alguien y por otro lado, en ocasiones, la propia relación sexual puede tener una función (por ejemplo en un contexto muy pobre de eventos gratificantes puede ser un aliciente.
Cómo aumentar el grado de control para fomentar un uso correcto
Entonces, ¿Cómo es posible aumentar el control en la gestión del tiempo?:
- Controla el uso del tiempo: una de las grandes herramientas de control del tiempo es el entorno y aquí hay tantas fórmulas como imaginación: observa el tiempo al que inicias la aplicación y ponte un límite (observa de forma continua el tiempo y cuando llegue ese tiempo marcado cierra la aplicación independientemente de las conversaciones surgidas), haz uso de aplicaciones que controlen la cantidad de tiempo invertido en la aplicación (Forest, Flipd, etc.). Incluso se puede hacer uso de amigos o familiares.
- Centra tu atención en lo importante e inmediato: si consideras que, aun poniendo límites de tiempo, sigues pensando en utilizar la aplicación y no puedes concentrarte, si estas aburrido en el trabajo y piensas en utilizarla, si consideras que no puedes dejar de pensar en que “necesitas” mantener una relación sexual, la solución es intentar dirigir tu atención a cosas del entorno más importantes o apetitivas. En muchas ocasiones la falta de control se puede deber a no poder dejar de centrarse en ciertos pensamientos o anticipaciones de situaciones apetitivas, para; ello lo mejor es dedicarse a otras cosas y no dejar que sea la emoción o pensamiento los que marquen la dirección de tu comportamiento.
- Haz un uso instrumental de Grindr: prioriza tus obligaciones o demandas del entorno y, una vez solucionadas, utiliza la aplicación como una forma de gratificación personal.
- Aumenta las fuentes de gratificación en tu día a día: si crees que Grindr cumple, muchas de las veces, una función distractora o de entretenimiento puede que sea el momento de aumentar tus fuentes de bienestar u ocio y para esto hay tantas opciones como intereses, cualidades y aptitudes en cada persona, desde el clásico ir al cine, leer, hasta cosas tan específicas como investigar la influencia de la cocina asiática en la latinoamericana. No significa que, en sí mismo, Grindr sea una mala opción para invertir tu tiempo de ocio, sino que podría haber otras mejores que no hayas explorado.
Usos potencialmente inadecuados ajenos a la falta de control
- ¿Utilizar estas aplicaciones para encontrar pareja estable? En este caso la respuesta es sencilla, puede que se dé esta situación, pero la probabilidad es muy baja, la clave sería intentarlo ajustando expectativas.
- ¿Tienes algún tipo de complejo físico? Aunque sea una pena es cierto que dentro del colectivo homosexual (especialmente entre hombres) los canones de belleza son muy exigentes y el hecho de que la interacción sea a través de una aplicación, con una persona que apenas conoces de nada, no va a ayudar a que se dé una comunicación educada, respetuosa o empática. Al ser una aplicación “a la carta” siempre estas expuesto al rechazo de terceros. En este caso, si te molesta de forma intensa ser rechazado, especialmente por no tener un físico abrumador o despampanante, convendría intentar trivializar estas situaciones. Es una aplicación en la que la mayoría de las personas solo buscan un tipo de físico particular sin valorar; que no gustes a ciertas personas solo significa que no gustas a esas personas, habrá a otras que sí. Aunque es innegable es que un físico en línea con los cánones de belleza facilita la situación, aún así, basar el concepto de ti mismo solo en el físico o en la valoración que terceros pueden tener de ti quizás no sea lo más conveniente.
- ¿Acabas de finalizar una relación sentimental y te vuelcas en la utilización de estas herramientas?: aquí conviene desmitificar, no tenemos por que guardar un luto a una relación que finaliza ni esperar a “superar” una ruptura para utilizarla, de igual forma el hacerlo no es per se una mala utilización de la aplicación. No obstante, hay que diferenciar entre tener un encuentro sexual porque te apetezca y quieras pasar un buen rato a hacerlo porque necesitas sentirte querido por otro o buscar dejar de sentirte mal.
- ¿Acabas de empezar tu vida sexual?: tengas la edad que tengas en este aspecto es pertinente ser tajante: no conviene iniciar tu vida sexual con la utilización de este tipo de herramientas por diversas razones, entre ellas que puede que no tengas las herramientas necesarias para utilizar la aplicación o manejar el encuentro sexual, puede que ciertas personas (por tener más experiencia o quizás por no tenerla la otra persona) intenten aprovechar la situación y realizar ciertos comportamientos o prácticas sexuales con los que no estés familiarizado o cómodo y además, debido a la poca experiencia, te sea difícil negarte o valorar lo inadecuado de la situación. Por último, y más importante, para iniciar una vida sexual quizás convenga un contexto más “natural” y no tan artificializado como un encuentro esporádico, pactado (en su contenido) e impersonal en muchas de las ocasiones.
- Red flags: por último, existen una serie de situaciones que te pueden dar pistas de que a lo mejor estas llevando muy lejos el uso de estas aplicaciones, por ejemplo: utilizar la aplicación en tu contexto laboral, estar pendiente de forma continua de las notificaciones, utilizar la aplicación siempre que sales de fiesta, etc. Esto en sí no es un problema, pero si se da de forma sistemática puede que estés haciendo un uso desmedido e inadecuado.
Entonces… ¿Cuál sería un uso adecuado?
En contraposición ¿Cuál sería el uso adecuado?, para ello solo hace falta responder a un par de preguntas:
- ¿Le dedicas un tiempo ajustado a tus obligaciones, preferencias o tiempo de ocio?
- ¿Eres capaz de expresar tus deseos, opiniones, de darse el caso, negarte a llevar a cabo prácticas sexuales que no te apetezcan o no creas convenientes?
- ¿Eres capaz de trivializar el uso que tienen estas aplicaciones y las opiniones, mensajes o preferencias de sus usuarios?
- ¿Puedes controlar tus ganas o necesidad de mantener una relación o encuentro sexual?
Si la respuesta es sí (la mayor parte de las veces que utilizas la aplicación) estas realizando un uso adecuado.
Entonces… ¿Es Grindr una buena herramienta?
Debemos tener cuidado con hacer lecturas generales y demonizar el uso de estas herramientas o colectivos que las utilizan. Resalto, una herramienta, en sí mismo no es ni buena ni mala, sino que depende del uso que hagamos de ella. Teniendo en cuenta, eso sí, que hay ciertas herramientas cuyo uso puede derivar más fácilmente en problemas.
De forma general, cuidado con ser dicotómicos y obsesionarse con el mal uso que hacemos de algo o lo que aquello pueda determinar de ti mismo. Si consideras que tu uso de este tipo de aplicaciones no es adecuado, que se te “va de las manos”, convendría plantearse o cambiar el uso que haces o simplemente no utilizarlas, puede que Grindr no sea para ti, que estés familiarizado o te resulten más atractivas otras formas de aproximarse a una persona y eso no significa que seas más o menos moderno, guay, inteligente, independiente, libre… Que estemos en la era de la comunicación no significa que todos estemos cómodos con ella ni que el hecho de no estarlo sea necesariamente negativo: lo pernicioso es forzarse a pertenecer a esta era a cualquier precio.
Con un adecuado uso, gestionando el tiempo que le dedicas y lo que haces con ella puede ser una buena herramienta si y solo si para ti es una forma correcta, adecuada y cómoda de entablar relaciones sexuales o afectivas.
Jorge Buenavida
Alumno Promoción 2017-2019
Artículos de interés:
https://www.vox.com/science-and-health/2018/4/4/17177058/grindr-gay-men-mental-health-psychiatrist
https://highline.huffingtonpost.com/articles/en/gay-loneliness/
http://time.com/3510261/hook-up-apps-destroying-gay-relationships/
https://www.elitedaily.com/dating/gay-hook-up-culture-grindr/1354315
https://www.theguardian.com/commentisfree/2013/apr/20/gay-culture-grindr-scene
Interesante artículo.
Esto que mencionas sobre las variables culturales del colectivo LGTBIQ+ como la hipersexualidad, superficialidad, jerarquización, valores sexistas o la facilidad a la exclusión, ¿a qué se debe? Es decir ¿a qué se debe ese tipo de características en el colectivo?